Cosa Fina

25 febrero 2007

Pocoyó

Reconozco tener prejuicios. Por ejemplo, nunca he sido capaz de ver los Lunnies. Es algo visceral, su visión me produce repulsión y me pregunto cómo los niños, que son tan sensibles a estas monstruosidades, han podido convertirlos en unos de los personajes más rentables de la televisión. Supongo que tiene que ver con la racionalidad deficiente, propia de estas edades tempranas. Al menos, esto es lo que alegaban para justificar que, en los Teletubbies, se repitieran ad nauseam las mismas escenas. Y es que parece haber una ley no escrita para las producciones dirigidas al público infantil: hay que tratar a los niños como subnormales (para que no olviden que sólo son niños, supongo). Precisamente por esta norma tácita, a Pocoyó le habla un adulto de for-ma muy pau-sa-da, pa-ra que no se le es-ca-pe na-da. Los narradores ya me resultan molestos, pero lo son todavía más cuando hablan como si fueran retrasados. Es lo único que le falla a esta serie que, por lo demás, es genial.

Pocoyó es una producción española, de animación 3D, que se ha vendido en más de 100 países. Cada episodio dura unos 6 minutos y relata una pequeña aventura que protagoniza este niño tan curioso e inquieto que, a sus cuatro años, empieza a descubrir el mundo junto a sus amigos Pato, Elly, Loula y Pajaroto. Los movimientos de Pocoyó son adorables y recuerdan a los del anime.

De hecho, hacen pensar en Arale, la protagonista de Dr. Slump, a quien Pocoyó se parece enormemente. Si no me creen, juzguen ustedes mismos:

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3 Comentarios:

Blogger Montse Akane dijo...

A mi también me recuerda a Dr. Slump, serie de la que soy mega-fan. Son monos.

En cuanto a los Lunnis, te remito a esto:

http://elrincondemontseakane.blogspot.com/2006/08/la-razn-de-mi-aversin-por-los-lunnis.html

Si ya repulsa verlos, inmagínate trabajar para ellos.

Un beso.

26/2/07 00:38  
Blogger jacarma dijo...

mmm... Ya me sabe mal tener que discrepar con vosotras pero yo he visto los Lunnis 4 o 5 veces y me han parecedio bastante divertidos. Nada que ver con los teletubbies que parecen subnormales de peluche.

Los capítulos que yo vi (aunque son para niños) tenian un buen ritmo y argumento y las historias eran interesantes y con un buen nivel cultural.

El parecido de Pocoyó con Arale es muy interesante, parece que la cultura nippona está empezando a calar en la europea.

26/2/07 09:31  
Blogger Ariadna Ferret dijo...

Jeje, no sabía que habías trabajado para los Lunnies, Montse. En todo caso, las ilustraciones son geniales.
Si me dices que los Lunnies no están tan mal, Jacarma, tendré que creérmelo: yo no juzgo (como tú) desde la experiencia, ya he dicho que se trata de un prejuicio.

26/2/07 10:42  

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